Gustavo Bueno me impresionaba cuando yo tenía 16 años... con el tiempo, te das cuenta de que:
1. Tampoco es para tanto.
2. Se ha creído su personaje y, cual Pérez Reverte con los tacos e insultos, se limita a decir chorradas pseudo-reivindicativas de lo que él considera como correcto.
Personalmente si se muriese no me daría ninguna pena, no le tengo ningún aprecio. Si hay algo que no me gusta son los santones poseedores de la verdad y conocedores del límite exacto del bien y del mal. (Porque no tienen ni idea de nada y todo lo que hacen está mal)